Somos muchos los que después de varios años viviendo en el extranjero, decidimos volver a casa.
Puede ser que durante tu estancia fuera compraras un coche y ahora no sabes si deshacerte de él y venderlo, o llevártelo a casa.
Si estás dudando sobre lo que quieres hacer con él o has decidido transportarlo y matricularlo en España, sigue leyendo.
Aquí te aclararé los papeles que necesitas para el trámite, dónde tienes que ir y dónde no, y lo que te va a costar todo.
Además, este artículo te servirá si el coche lo has adquirido en un país de la Unión Europea (UE) o en un país que se encuentra dentro del Espacio Económico Europeo (EEE).
Los países integrantes del EEE son los 27 países que ya conforman la UE, Reino Unido (al menos hasta Diciembre del 2020), y los países miembros de la Asociación Europea de Libre Comercio (AELC) Islandia, Liechtenstein y Noruega.
NOTA: Nunca debes confundir el EEE con la AELC, ya que Suiza forma parte de esta última pero no forma parte de del EEE, por lo que tiene una legislación y unas leyes diferentes para poder realizar el trámite que te voy a explicar aquí.
Específicamente te voy a explicar el trámite que he realizado personalmente para matricular mi coche en España comprado en Noruega.
Antes de nada, lo primero que tienes que tener claro es que:
- El coche tiene vigente el seguro del país de origen.
- El coche está al día de revisiones y ha pasado satisfactoriamente su inspección técnica en el país de origen.
- El coche no cuenta con deudas pendientes (multas, impuestos a deber, etc).
- Cuentas con el permiso de conducción oficial del coche del país de origen.
Éste último punto es de vital importancia, puesto que sin el permiso de circulación no podrás hacer nada.
Además, y aunque lo he omitido arriba, el permiso de conducción debe estar a tu nombre. Aunque parezca obvio, no puedes matricular un coche que no está a tu nombre, es ilegal.
Una vez aclarado esto, vayamos al lío.
Para conseguir una matrícula y un permiso de conducción españoles, tendrás que cumplir 3 requisitos esenciales:
- Pasar la inspección técnica de vehículos (ITV) en España.
- Pagar el impuesto de matriculación correspondientes en la Agencia Tributaria.
- Pagar el impuesto de circulación en el ayuntamiento donde estés empadronado.
Una vez lo tengas todo, tendrás que presentar los documentos en la Dirección General de Tráfico (DGT). Pero vayamos paso a paso:
1. Pasar la ITV de un vehículo extranjero en España
Esta es quizás la parte más complicada del proceso.
Normalmente, para conseguir una cita en la ITV existen dos métodos: llamando por teléfono al 959 999 999 o a través de la web de cita previa.
Desafortunadamente, si lo intentas de cualquiera de estas maneras, no podrás conseguirla.
Los vehículos extranjeros que van a pasar su primera ITV en España llevan un proceso distinto.
Tendrás que ir físicamente a la ITV más cercana y presentar el permiso de conducción oficial a tu nombre (del país de origen) y la ficha reducida de tu vehículo.
¿No sabes lo que es una ficha reducida? Tranqui, aquí te lo explico.
Básicamente, es un documento necesario para la homologación de vehículos de importación, vehículos clásicos/históricos y para aquellos vehículos que hayan sufrido transformaciones/modificaciones recogidas en el Manual de Reformas de Importancia de la ITV.
En tu caso, te va a hacer falta para homologar tu vehículo extranjero.
Este documento lo hacen Ingenieros Técnicos Industriales, y no es necesario que movilices tu coche y se lo lleves al ingeniero para que te haga la ficha. Con aportar la documentación oficial del coche y las fotos que te pidan es suficiente.
Si no tienes amigos ingenieros que te puedan hacer el favor, busca en tu ciudad algún ingeniero que lo haga.
También puedes probar por internet, hay profesionales que publicitan sus servicios online y te mandan la ficha reducida en 24/48 horas.
Los precios varían mucho dependiendo del profesional y la experiencia. Hazte con varios presupuestos, compara y quédate con el mejor.
Una vez tengas la ficha reducida, es hora de que te presentes físicamente en la ITV, entregues el permiso de conducción oficial y la ficha reducida.
Ellos se quedarán la documentación y te mandarán a casa.
Te llamarán en unos días para confirmarte el día exacto que deberás llevar el coche y pasar la ITV.
En cuanto al coste de la inspección, debes saber que pasar la ITV de un coche con matrícula extranjera es más caro que pasar la ITV de un coche con matrícula española.
En mi caso, tuve que pagar 154€.
2. Pagar el impuesto de matriculación en la Agencia Tributaria
Para cumplir con este requisito, lo primero es pedir una cita previa en la sede de la agencia tributaria más cercana.
Puedes hacerlo en este enlace.
CONSEJO: Pide la cita en la agencia tributaria y la cita de la DGT (que he mencionado al principio) incluso antes de comenzar los trámites. Es posible que las sedes de estas dos entidades estén muy saturadas y no tengan citas disponibles pronto.
También podrías ir directamente a la sede más cercana sin cita previa, aunque no te lo aconsejo.
Si lo haces y la sede está saturada, es posible que te manden a casa después de haber perdido muchas horas esperando.
Lo único que necesitas para la cita será presentar tu DNI y la ficha técnica de tu coche que te entregan en la ITV cuando la pasas satisfactoriamente.
Comprobarán los datos técnicos, lo apuntarán todo en un documento específico y aplicarán unos porcentajes según el tipo de vehículo, año de primera matriculación y cantidad de CO2 que emite el vehículo.
Puedes consultar todo lo relacionado con el pago del impuesto de matriculación en la agencia tributaria aquí.
También existe la opción de que seas tú mismo quien organice el pago del impuesto a través de la sede electrónica de la agencia tributaria.
Esta opción la intenté personalmente después de resolver algunas dudas técnicas.
Sin embargo, los datos que exigen y los porcentajes que tienes que aplicar no son sencillos si no estás familiarizado al 100% con este tema, por lo que te aconsejo que vayas personalmente si no quieres terminar pagando de más o no hacer el trámite correctamente.
El importe que tendrás que abonar puede variar mucho y depende, entre otros factores, de:
- El año de primera matriculación.
- Tipo de vehículo.
- Su uso (para uso propio, para transportes, etc).
- Emisiones de CO2.
- Si es eléctrico o no.
- Porcentajes de descuento que apliquen en el momento del pago del impuesto de matriculación (varía anualmente).
En mi caso, por un Volvo V50 matriculado en 2007 por primera vez, y unas emisiones de 132g de CO2/km tuve que pagar unos 83€.
Es importante que tengas en cuenta que en las sedes de la agencia tributaria no aceptan dinero ni cuentan con cajeros para realizar pagos.
Cuando presentes tu documentación, te darán un volante que tendrás que presentar en el banco más cercano, pagar con dinero en efectivo, que el banco te devuelva el volante sellado como pagado, y volver a la agencia tributaria para entregar el papel y terminar el trámite.
Una vez acabado, te darán un documento que tendrás que presentar posteriormente en la DGT.
Guárdalo a buen recaudo.
3. Pagar el impuesto de circulación
Ya estás en el penúltimo paso.
En esta ocasión no necesitarás cita.
Acércate una mañana temprano a tu ayuntamiento y pregunta dónde tienes que ir para pagar el impuesto de circulación en tu ayuntamiento.
Cada ayuntamiento es diferente, y tienen unos protocolos y una manera de trabajar distintas.
En mi caso, tuve que registrarme en la entrada y alegar que quería pagar el impuesto de circulación de un coche por primera vez.
Me pidieron DNI, la ficha técnica de la ITV española y crearon un alta nueva.
Cogí el documento del alta y me dirigí al mostrador que atiende este tipo de trámites. Me dieron un volante de pago y me fui a la zona de cobros del ayuntamiento.
Pagué (con tarjeta), entregué el comprobante en el mostrador anterior, y me dieron el documento que confirma que el impuesto de circulación del coche está pagado correctamente.
Cuando obtengas ese documento, guárdalo “bajo llave”, la DGT te lo pedirá.
NOTA: Es requisito obligatorio estar empadronado en la ciudad/pueblo del ayuntamiento donde registrarás el coche y pagarás el impuesto de circulación. Asegúrate de ir al ayuntamiento correcto.
Éste trámite varía según el ayuntamiento y el impuesto que hayan establecido ese año. En mi caso fueron 60,33€ (2020).
Una vez llegado hasta aquí, sólo te faltará ir a la DGT y entregar todos los documentos:
- Permiso de circulación original a tu nombre del país de origen.
- Ficha técnica de la ITV española.
- Volante de pago del impuesto de matriculación de la Agencia Tributaria.
- Volante de pago del impuesto de circulación del ayuntamiento donde estés empadronado.
En la DGT tendrás que rellenar un formulario específico y pagar las tasas de tráfico (en 2020 son 97,80€).
Si todo está correctamente, y tras esperar unos minutos, te entregarán tu permiso de conducción español a tu nombre con tu nueva matrícula expedida.
Para acabar de hacer las cosas bien, recuerda que antes de ponerle la nueva matrícula a tu coche, éste debe tener un seguro español, es obligatorio.
Una vez que tengas tu coche asegurado en España, ya podrás dar de baja el seguro del país de origen del coche.
NOTA: Si tu coche tiene procedencia Noruega (como en mi caso), ten en cuenta que no podrás dar de baja manualmente tu seguro, éste se cancelará automáticamente en cuanto el Statens Vegvesen (la DGT Noruega) reciba la orden de que el coche se ha registrado en otro país.
Acércate a una tienda especializada donde te hagan la nueva matrícula enseñando tu permiso de circulación español (tardan minutos y cuesta alrededor de unos 15€ por placa) y todo estará listo.
¡A disfrutar!
Espero que te haya servido.
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¡1 abrazo!